Con paciencia y constancia hemos podido reconstruir una braquimetatarsia múltiple en ambos pies. La cirugía estética del pie progresa

Posted on 13/10/2012

Los pacientes se van sucediendo y cada vez se ponen delante nuestro, casos cada vez más complejos, que nos hacen estrujarnos el cerebro para solucionarlos definitivamente. Muchos de estos casos ni siquiera están descritos en los libros o revistas de manejo habitual. Nosotros siguiendo las premisas de la filosofía del judeo español Baruch Spinoza, siempre buscamos las causas de las cosas para una vez conocidas, poderlas quitar. No creáis, que a veces nos resulta difícil poder hacerlo y muchas otras estamos caminando por el borde del “precipicio”, arriesgando, pero puedo deciros que en la mayoría de los casos salimos triunfantes y solucionamos los problemas.

Desde una ciudad del Mediterráneo, apareció un día en la consulta acompañada por sus padres, Mariana llamemosla así, con unos pies muy deformes que le producían problemas funcionales pero sobre todo estéticos, en una paciente adolescente. Nuestra constante búsqueda de soluciones en el nuevo campo de la cirugía estética del pie, diseñado por nosotros, hizo que aceptáramos el reto de alargar dos metatarsianos en el pie izquierdo y uno en el derecho. Las braquimetatarsias que padecía eran muy importantes, con severos acortamientos del 3º y 4º metatarsianos del pie izquierdo y del 4º en el pie derecho.

Como sabéis luchamos permanentemente por solucionar esos problemas sin tener que utilizar los pesados, incomodos y cada vez menos usados mini fijadores externos.

Secuenciamos las cirugías alargando primero el 3º del pie izquierdo, luego el 4º del pie derecho y por último el 4º del pie izquierdo, esto nos ha tomado un poco más de un año. En este caso los acortamientos eran severos, algunos de tres centímetros de longitud. Por esto tuvimos que utilizar un sistema mixto,colocamos un distractor, durante 15 díaspara conseguir la longitud deseada. Al cabo de este tiempo lo retiramos y el espacio dejado lo rellenamos con injerto del propio paciente, sin colocar ningún tipo de placa para sujetarlo.

Poco a poco fuimos reparando los pies, hasta conseguir el resultado que podéis ver en las fotos, pudiendo andar la paciente normalmente como se ve en el video. Mi reconocimiento a la paciente por tener la madurez suficiente para soportar este largo procedimiento y a sus padres que siempre estuvieron apoyando a su hija y al médico.